La iglesia de San Gil Abad presenta el modelo tipo de las iglesias columnarias. Comenzó a construirse en el segundo tercio del siglo XVI terminándose la obra a finales del XVII.
La planta de la iglesia respeta fielmente los modelos de planta de salón, siendo su longitud algo más del doble que su anchura. Estamos ante una disposición rectangular, repartida en tres naves de idéntica altura separada por pilares, siendo la central el doble de ancha que las laterales. En sentido transversal está dividida en cinco tramos, casi idénticos los cuatro primeros, siendo el quinto sensiblemente inferior. Un ábside poligonal en la cabecera, y coro a los pies, ambos centrados sobre la nave principal, presiden el interior del templo. Se completa la planta con la sacristía y dos capillas laterales tanto en la nave de la espistola como en la del evangelio, ocupando cada una de llas un tramo transversal.
El acceso al interior del templo se realiza por dos puertas dispuestas en el penúltimo tramo de la iglesia orientadas al sur y al norte. Son dos portadas casi idénticas entre sí.
Al exterior del templo grandes fachadas de anchos muros. Los muros se rematan con una cornisa moldurada que recorre el edificio en todo su perímetro, únicamente interrumpido al llegar a la torre.
Los materiales y fabrica de los muros también varía: para el primer plano y la cabecera se ha usado mampostería, y sillares de piedra para el resto.
Adosadas al muro y en relación con los grandes pilares interiores, se sitúan de forma equilibrada y proporcional pilastras y semicolumnas. Al exterior gruesos contrafuertes.